sábado, 28 de septiembre de 2013

ANEXOS VIRGEN DE GUADALUPE


Licensed under Public domain via Wikimedia Commons 

Hoy 28 de octubre se inician los 46 Rosarios en honor de la Virgen de Guadalupe, por las 46 estrellas que se ven en su manto. 
Resultado de imagen para 46 rosarios a laVirgen de Guadalupe

JUAN DIEGO EN PERSONA

Dr. Roberto Robles Nieto
-        Nació en 1474.
-        Originario del barrio de Tlayácac en Cuautitlán.
-        Su nombre pagano fue Cuauhtlatóhuac que con terminación tzin (Cuauhtlatoatzin) en náhuatl significa un trato reverencial.
-        Su esposa se llamaba María Lucía, quien falleció en 1529.
-        No tuvieron hijos Juan Diego y María Lucía, pero adoptaron un hijo.
-        En 1526, junto con su esposa María Lucía y su tío Juan Bernardino, recibió el Sacramento del Bautismo en el Templo de Santiago Tlaltelolco.
-        A la muerte de su esposa, en 1529, Juan Diego decidió trasladarse a Tulpetlac para vivir con su tío Juan Bernardino.
-        En la presentación que se hace de Juan Diego, se dice de él: “Ce Ma-cehualtzintli”, es decir que era un “macehualli” que bien puede traducirse con un “indiecito”, o mejor aún, como “un honorable hombre de pueblo”.
-        Su trabajo consistía en tejer petates que vendía junto con otros productos elaborados con tule.
-        Tenía algunas propiedades, entre ellas la casa donde habitaba con su tío (hoy Templo de Nuestra Señora de la Salud) y otros bienes, los cuales regaló después de su encuentro con María en el Tepeyac.
-        Las tradiciones refieren que el mismo día que se trasladó la Sagrada Imagen a la primitiva ermita, Juan Diego dejó su casa y su pueblo y, con licencia del obispo, se trasladó a vivir y a servir en la de María Santísima.
-        Desempeñó los oficios de cuidar, barrer, cargar y llevar todo lo necesario para la ermita, todo con humildad, prontitud y devoción.
-        Ocupaba largos ratos de tiempo en oración ante la Santa Imagen.
-        Con permiso del obispo, comulgaba tres veces por semana, cosa muy rara entonces, y se ejercitaba en la mortificación y en ayunos. Además, atendía con gran amabilidad a los peregrinos a hora y deshora.
-        Llevó Juan Diego sobre sí una manta con una copia de la Imagen original de la Virgen de Guadalupe, “de una tercia de larga y una cuarta de ancha; hasta que a su muerte se la dejó a su hijo adoptivo, quien a su vez la dio a su nieto y fue a parar a un sacerdote de Querétaro” y luego se perdió.
-        Falleció el día 12 de junio de 1548, a la edad de 74 años.
-        Fue sepultado junto con su tío Juan Bernardino en la primera ermita dedicada a la Virgen de Guadalupe.
-        Desde antes de las apariciones ya era tenido Juan Diego, entre los que le conocían, como un hombre bueno y justo. Después de sus encuentros con la Virgen llevó una vida ejemplar y las gentes lo tenían por santo.
-        A partir de su muerte y hasta nuestros días se ha extendido el culto y veneración. Muchas familias han puesto a sus hijos el nombre de Juan Diego por la devoción que le tienen. Y algunos padres al bendecir a sus hijos, todavía dicen: ¡Que Dios te haga como Juan Diego”.
-        El día 9 de abril de 1990, en el Palacio Apostólico de Roma, en presencia del Papa Juan Pablo II, de varios Cardenales y de muchos prelados, se aprobó públicamente el Decreto de la Congregación de las Causas de los Santos “de culto inmemorial” por el que se declaraba que Juan Diego había vivido las virtudes cristianas en grado heroico.
-        El Santo Padre, el Papa Juan Pablo II, en una solemne ceremonia en la Insigne y Nacional Basílica de Guadalupe de México, lo reconoció oficial y solemnemente como Beato el día 6 de mayo de 1990.
-        El 9 de diciembre ha sido declarado como fiesta del beato Juan Diego. Inicialmente se le había pedido al Papa que eligiera el 12 de junio (aniversario de su muerte y día de su nacimiento al Cielo) como fiesta litúrgica, pero el Papa Juan Pablo II dijo: “No; que sea el 9 de diciembre, porque fue el día en que vio el Paraíso”, es decir, la primera aparición.
Se paro Juan diego y dijo para si.  ¿Por ventura soy digno de lo que oigo?. Quizá sueño?, me levanto de dormir?. ¿Donde estoy?. Acaso en el paraíso terrenal, que dejaron dicho los viejos, nuestros mayores?. ACASO YA EN EL CIELO.


ANEXOS

LA IGLESIA CATOLICA EN LA HUASTECADiocesis de Huejutla Hidalgo
http://www.azc.uam.mx/socialesyhumanidades/03/reportes/soc/lec/vlso002.pdf


MIGUEL CABRERA

Nació en Antequera de Oaxaca en 1695. Los nombres de sus padres son desconocidos, pero de sus tíos se tiene noticia de que fueron una pareja de mulatos. Se presume que se formó en el taller de José de Ibarra en donde inicia su actividad artística hacia 1740. Cabrera tal vez sea el pintor novohispano más conocido en México, puesto que se le atribuyen trescientas obras aproximadamente. Por una parte, se encuentra su pintura relativa a la vida de diversos santos, como Vida de San Ignacio en la Iglesia de La Profesa en la Ciudad de México y Vida de Santo Domingo en el monasterio de la misma ciudad. Su obra ganó tal fama y reconocimiento en la Nueva España que llegó a ser pintor de cámara del arzobispado de México, Manuel Rubio y Salinas. Gracias a esta autoridad, una de sus obras guadalupanas llegó a la vista del Papa Benedicto XIV1y debido a ello y al reconocimiento del que le otorgó el Papa, Cabrera se convirtió en el pintor guadalupano más recurrido y renombrado. 

CENTRO DE RESTAURACION  MURCIA
Autor: Miguel Cabrera
Medidas: 126.5 x 192.5 cm.
Época: Siglo XVIII
Técnica: Óleo sobre lienzo
Propiedad: Iglesia de San Juan Bautista de Murcia
Plazo de Intervención: 5 meses




Informe Histórico-Artístico:

Javier Fuentes y Ponte describe la cuarta capilla de la iglesia de San Juan Bautista de Murcia, como un espacio provisto de una serie de elementos decorativos entre los que descuella la cruz de la orden de San Juan de Jerusalén, así como las tallas enlienzadas de dos ángeles adorando a la titular de la capilla, la Virgen de Guadalupe:

“…
 es un hueco adintelado, guarnecido por una jamba y defendido por una vidriera, en su fondo se venera un cuadro en lienzo de 1m.58 de altura, por 1m 06 de ancho, representando a Nuestra Señora de Guadalupe, del mismo modo que todos los de dicha advocación, pero con la particularidad que en ésta el colorido de las carnes no es negro sino natural y sonrosado: en los cuatro ángulos de la pintura destacando de las nubes, hay respectivamente un medallón rodeado de un cartonaje figurando marco del estilo de Luis XV, cuyos medallones que representan cuatro sucesos principales de la aparición y milagros, están sostenidos por querubines; en el fondo, parte inferior, hay una inscripción con caracteres cursivos en que se lee: “Miguel Cabrera pinxit” y en un cartonaje pintado que une los dos medallones inferiores hay otra: ”Se tocó a su sagrado original el día 8 de marzo de 1768”. 

También el erudito J. Crisanto López Jiménez reseñó este lienzo en su artículo
 Pinturas mexicanas en Murcia (AEA, 1958,T. XXXI, p. 149), sin olvidar el catálogo de Mª C. García Saiz La pintura colonial en el Museo de América (I): la Escuela Mexicana Ministerio de Cultura, 1980, p. 30 y ss.

La obra fue realizada por Miguel Cabrera el mismo año de su muerte (h.1710-1768) respondiendo al estereotipo marcado por esta interesante iconografía mariana, iconografía que formalmente deriva de la imagen apocalíptica, con algunos elementos y trasuntos de tradición plástica vernácula. En la obra que nos ocupa, descuellan las pinturas dispuestas en los cuatro ángulos y que representan escenitas vinculadas a la aparición de la Virgen al indio Juan Diego y milagros varios, así como las cabezas de angelotes que enmarcan estas escenas. En ellas y pese al carácter eminentemente decorativo, el autor ha sabido plasmar un gusto exquisito por la composición y el color, donde el tratamiento de rostros, veladuras, la disposición compositiva en general imprime un resultado preciosista; resultan imágenes muy amaneradas pero llenas de ternura y muy acordes con otras pinturas de Cabrera, también de temática religiosa, de gusto exquisito cercano al Rococó.


El origen de esta exótica pieza habría que buscarlo en las donaciones de carácter devocional de personajes ilustre a capillas, oratorios, parroquias o catedrales que a lo largo de los siglos XVII y XVIII se sucedieron; estas piezas de excelente calidad en muchos casos, procedían del Virreinato de Nueva España. La imagen de la Virgen de Guadalupe, cuyo Origen remoto y etimológico hay que buscarlo en el monasterio extremeño, constituye uno de los acicates piadosos de más arraigo en nuestra península procedente de nueva España. Si bien su tipología responde a la imagen trentina de la Tota Pulcra de raigambre apocalíptica esta nueva imagen incorpora ligeras novedades relacionadas con la aparición a Juan Diego, el mensaje al obispo Zumárraga y el milagro del ayate fundamentalmente. Muy pronto se difundieron textos, leyendas e imágenes en aras de la legitimación de una advocación mariana particularísima; así, Becerra Tanco apuntó la distintiva característica de la tez morena de María como un elemento más para corroborar el sentimiento religioso nacional, en este caso del pueblo mexicano (Barea, 186).

Literatos y teólogos, tales como Miguel Sánchez, Luis Lasso de la Vega, Francisco de Florencia o Cabrera y Quintero reconocieron  la verdadera imagen de la Virgen María en esta advocación indígena y la trascendencia de sus milagros como una verificación de la conciencia nacional. Pero, sin lugar a dudas, uno de los aspectos más interesantes constituye la publicación en 1756 de
Maravilla americana y conjunto de raras maravillas observadas con la dirección de las reglas del arte de la pintura en la prodigiosa imagen de Nuestra Señora de Guadalupe de México” del pintor Miguel Cabrea que en este pequeño ensayo aduce la naturaleza divina de la imagen reproducida en el ayate.

Los primeros repertorios iconográficos surgen entorno a 1620 a través de los grabadores Miguel Sánchez, Samuel Estradanus y Antonio de Castro siendo una de las pinturas más antiguas la realizada por el español Baltasar de Echave Orio.

La obra que nos ocupa ha sido considerada como uno de los ejemplares más hermosos de Cabrera en España presenta a la Virgen de Guadalupe entre las cuatro escenas milagrosas cuya impronta narrativo/contemplativa es evidente; cartelas decorativas que recuerdan a rocallas junto con un fresquísimo repertorio de ángeles tenantes aportan a la composición general una exquisita factura.

Hasta 1760, según González Moreno, son frecuentes las formas poligonales en las cartelas o medallones. De igual forma, remarca que un gran porcentaje de las imágenes del siglo XVIII de la Virgen de Guadalupe conservadas en España incorporan las cartelas o medallones.




Con motivo de un reciente ESTUDIO DE LA IMAGEN CON RAYOS INFRAROJOS, llevado a cabo por lo Norteamericanos Smith y Callahan, que ha causado gran revuelo por sus atrevidas afirmaciones, pero que contiene una gran aportación a la valoración de la Imagen, afirman estos dos científicos que tanto las fotografías tomadas con la luz visible como las tomadas con película Infrarroja, muestran que en el área de las vestiduras, del rostro y de las manos NO HAY PREPARACION DE NINGUN TIPO, ni inferior ni superior.
Sin embargo a este dato no se le ha dado la importancia que tiene y todo se ha centrado en otras partes de la imagen  en las cuales si aparece alguna preparación.  (usada posteriormente).
La imagen de María esta ESTAMPADA en la Tilma,  no esta pintada sobre el lienzo sino estampada el la trama misma. Como si los hilos fueran de  color, o más bien, como los microcristales del Colibrí que no tienen color, sino que descomponen la luz en sus variados colores. (Iridicencia).
Visto el lienzo por el revés, se ve transportada toda la Santa Imagen, con todos los colores que se admiran en el haz.
El Dr. Juan Melgarejo en 1666 afirma que en la parte posterior se notan embebidos e incorporados los colores y por este lado la materia se palpa con aspereza y dureza, en cambio por la parte anterior se siente suave y blanda a tal grado que no le hace oposición a la seda, con todo lo cual es inexplicable su conservación.
El estudio de Callahan  Smith habla sobre algunas añadiduras que se hicieron a la Imagen Original, sobretodo durante el tiempo que estuvo sin vidrio y al descubierto.
· Callahan Philip S.  Yody Brant Smith. ‘La Tilma de Juan Diego’  . Ed.  Alambra Mexicana S. A.  1982 . En la nota 24, pag. 102.
El Sr Abad nos informa que en algunas zonas se percibe alguna preparación de color blanco que atraviesa el lienzo y es visible por el reverso.
Las fibras bajo el cuerpo y el rostro CARECEN DE TODO APAREJO, mientras que el resplandor y las nubes si tienen emplaste.
El área de las nubes exteriores tiene un emplaste muy grueso. Pero poco puede decirse de este, fuera de que parece ser una especie de Cal al fresco, aplicada sobre la Tilma cundo esta se encontraba ya sentada sobre un solido Bastidor. Como se fijo el oro de los rayos y de las estrellas es algo inexplicable dentro de esta técnica.
Sin embargo hay conclusiones sin fundamento. A partir de las fotografías sacadas al infrarrojo, rechazan  varias partes de la Imagen como añadiduras tardías. Esta afirmación es falsa como puede comprobarse por medio de una de las copias más antiguas que en 1560 regala el obispo de México, Montufar al rey Felipe II.

Se ha hablado de "retoques" a la imagen original, entre otros, que le fue borrada la corona que tenía originalmente, y que describen, por ejemplo, el  Nican Motecpana, Miguel Sánchez, Miguel Cabrera; los científicos de la N.A.S.A. Callagan y Smith hablan también de retoques, como el ángel, la luna y el resplandor dorado que rodea a la Virgen; finalmente, una teoría más aventurada de Leoncio Garza-Valdés sugiere que la imagen original no fue la que hoy vemos, sino una Virgen con un niño, idéntica a una imagen que está en el coro de la Iglesia de Guadalupe de Extremadura.
TAMBIEN SE LE HA QUERIDO COMPARAR CON LA VIRGEN ESPAÑOLA DE GUADALUPE  POR SU NOMBRE.
Y CON LA DIOSA AZTECA CUATLIQUETL QUE ES LA MADRE DE SUS  DIOSES CELESTES , EL SOL DE LA LUNA Y LAS ESTRELLAS.


LEPANTO
Estandarte de  Lepanto año 1571, 40 años después de las apariciones de la Santísima Virgen de Guadalupe en América.
Una de esas pruebas del conocimiento temprano de las apariciones y de que la Imagen es así desde el principio es precisamente la aparición en Europa de un estandarte de la Santísima Virgen de Guadalupe en el buque insignia del almirante Juan Andrea Doria, durante el triunfo de la Batalla de Lepanto contra los mahometanos, el 7 de octubre de 1571.
En el año 1571, Batalla de Lepanto en 1571 un grabado, muestra una escena de la batalla de Lepanto representando a la galera de Andrea Doria, donde se advierte la presencia clara de la Virgen de Guadalupe de México.
Dicho lienzo se conserva ahora en la iglesia de La Madonna di Guadalupe en Santo Stefano d´Aveto, en Italia, donde se venera a Ntra. Sra. de Guadalupe de México. 


Lepanto y la Virgen de Guadalupe


En 1571, 40 años después de las apariciones de la Santísima Virgen de Guadalupe en América, el almirante Juan Andrea Doria llevaba consigo una pequeña réplica de la Virgen de Guadalupe (Patrona de México y Emperatriz de América). Esta imagen se encuentra en la iglesia de San Estéfano en Aveto, Italia.
La fuente principal para determinar si la imagen guadalupana estuvo en Lepanto, es un libro de Antonio Domenico Rossi, titulado La B.V. di Guadalupe e S. Stefano d´Aveto. Note i Documenti, publicado por Tipografía Artística Colombo en 1910.

Aunque muchas fuentes mencionan este estandarte, son pocas las que estudian un poco más detalladamente el tema, aunque hacen constar que a 40 años de las apariciones, la imagen ya se encontraba en Europa y era estimada por los españoles, descartando así la idea de que la devoción guadalupana era exclusiva de indios, mestizos y criollos, pues aún si no estuvo en la galera de Doria durante la batalla de Lepanto, sí estaba en su poder y en Europa, donada por el rey Felipe II.
Lo interesante del caso es que la imagen que se venera en Santo Stefano d´Aveto es igual a la que está en la tilma de Juan Diego en la Basílica del Tepeyac, y por lo tanto, permite aproximar la fecha de los "retoques" denunciados por Callagan y Smith.




En ella, Mons. Rossi proporciona una historia del culto a la Virgen de Guadalupe en el valle de Aveto (Italia). En la iglesia de Santo Stefano d´Aveto se encuentra una imagen de la Virgen de Guadalupe en lienzo, que donó en 1811 a dicha iglesia Su Eminencia el cardenal Juan Doria Pamphili, secretario de estado de S.S. Pío VII, y quien era descendiente del almirante Andrea Doria. La donación a esta iglesia interesa por los testimonios que rodean a dicha imagen, y que se refieren, precisamente, a la presencia que haya tenido en la jornada de Lepanto.

El abuelo de Mons. Rossi, el abogado del mismo nombre Antonio Domenico Rossi, escribió una Memoria que se conserva en el archivo parroquial de Santo Stefano d´Aveto, donde dice: "Dicho cuadro es una copia verdadera del original que existe en México, y fue llevado a Génova en las galeras del Almirante de España Juan Andrés Doria. Si se confronta el tiempo en que fue llevado como imagen principal de la capitana de dichas galeras, es azonable creer que el mencionado cuadro estuvo en la nave capitana en la famosa batalla de Lepanto en el día de la inolvidable victoria de los cristianos sobre los turcos, ganada por interés de María Santísima".
A la izquierda la imagen guadalupana que se venera en Santo Stefano d´Aveto, y a la derecha el estandarte principal de la flota cristiana, con Cristo crucificado y los escudos del Papa, España y Venecia
En el libro de Mons. Rossi encontramos el siguiente testimonio (cap. IV de su obra citada):

"Habiendo sido descubiertas en el Palacio de Su Excelencia, el señor príncipe Doria, dos imágenes de la Virgen de Guadalupe, se hicieron gestiones con éxito, para conseguir una de ellas como regalo del Eminentísimo señor cardenal don José Doria, que en aquel entonces, por las cuestiones entre la Iglesia y el Imperio, se hallaba en Pegli. Fue la más pequeña; de la que se asegura con toda certeza, y como consta en el archivo de la nobilísima familia, que fue tocada por el original y que Su Majestad Católica regaló al inmortal Juan Andrés Doria, el gran Almirante de España, para que le sirviese de imagen en la capilla de la principal de las galeras que mandaba el célebre capitán. Por la concordancia de las fechas, debió encontrarse la imagen en la nave capitana en la época en que se dio la famosa batalla de Lepanto, en que por intercesión de la Virgen María, la cristiandad obtuvo sobre el Turco la más señalada victoria". 




PRUEBAS HISTORICAS.
CODICE ESCALADA,  O CODICE  1548
LA PRUEBA HISTORICAMENTE MAS PROXIMA A LAS APARICONES Y LA MÁS RECIENTEMENTE DESCUBIERTA.
El padre jesuita, Xavier Escalada fue uno de los principales investigadores de las apariciones de la Virgen de Guadalupe y su trabajo fue decisivo para la canonización de Juan Diego, gracias al descubrimiento y estudio del Códice "1548" o Códice "Escalada" que es considerado el documento más antiguo con respecto a las apariciones de la morenita del Tepeyac. 
El 12 de diciembre de 2003 el programa de televisión por internet "Realidad Punto Cero", tuvo la oportunidad de entrevistar al padre Escalada y sus conductores Adrián Moscoso y Yohanan Díaz Vargas conversaron con él por más de 30 minutos, donde fue cuestionado sobre la visión que debían tener los jóvenes ante el milagro guadalupano. 
Una plática extraordinaria por la sencillez del prelado y por la claridad de sus conceptos que a su vez eran muy simples y sencillos de entender, pero en todo momento cargados de mucho amor. El padre Escalada falleció a la edad de 88 años en octubre de 2006 y a manera de homenaje comparto con ustedes, estimados amigos, esta interesante entrevista con uno de los hombres que en su momento fue considerado el más preparado e importante de la Iglesia Católica en México.
Escribió los libros de "Ven Jesús no te tardes", "Levántate en Nombre de Jesús" y lo que se considera su magna aportación a México, "La Enciclopedia Guadalupana".

CODICE ESCALADA,  O CODICE  1548

CÓDICE 1548
- Es el documento más antiguo que existe sobre la Guadalupana.
- Claramente se percibe su fecha, 1548, en la parte más alta del centro.
- Está dibujado sobre piel de animal; mide 20 por 13.3 Cm.
- Tiene tres inscripciones en lengua Náhuatl.
- “También en 1531… Cuautlactoactzin se hizo ver la amada madrecita, nuestra niña, de Guadalupe en México”.
- “Murió con dignidad Cuautlactoactzin”.
- Glifo y dibujo : “Juez Antón Valeriano”


LA PRUEBA HISTORICAMENTE MAS PROXIMA A LAS APARICONES Y LA MÁS RECIENTEMENTE DESCUBIERTA.
REALIZADO DE  PUÑO Y LETRA POR LOS ALUMNOS DE  LA CRUZ  DE TLATELOLCO  EN PIEL ANIMAL  COMO UN HOMENAJE A JUAN DIEGO  POR SU  MUERTE (1548)





CODICE ESCALADA, 1548




LA SABANA SANTA
40  CONFERENCIAS DEL P- JORGE LORING S.I.


CATOLICIDAD

Vasos sanguíneos  DR. JORGE ESCALANTE

CODICE

HECHOS MILAGROSOS

ESTAMPACION

OJOS MISTERIOSOS

ESTUDIOS CIENTIFICOS

LA LUNA


guatemala

MISTERIOS

NUEVOS DESCUBRIMIENTOS

JESUS  HERNADEZ  SU OJO

HISTORY CHANEL


VERDADERO ROSTRO ( ver la primera parte)



EL MISTERIO DE LOS OJOS

MAS  DE LA VIRGEN DE GUADALUPE

LA VIRGEN DE GUADALUPE DESDE LO ALTO

LOS  CODICES DE GUADALUPE



MADRE DE GUADALUPE, MADRE DEL PUEBLO MEXICANO
MEXICO Y SU IDENTIDAD GUADALUPANA
ave

RELACION CRONOLOGICA DE LOS HECHOS DEL TEPEYAC

CATOLICOS ONLINE

CATOLICIDAD
MISTERIOS DE LA VIRGEN

CATOLICIDAD
NO ESTOY YO AQUÍ


IMBOX

LA TILMA DE JUAN DIEGO
Verdades y mitos

LA IMAGEN

LA TILMA


VIDEOS
VIDEO  COMPOSICIO MUSICAL

MIRACULOUS TILMA
LAS PRUEBAS
LA VIRGEN

MUSICA DEL REINO DE DIOS

¿Tecnica o milagro?  Callahan

 LA BASILICA
Basilica de Guadalupe.JPG




EMPERATRIZ DE AMERICA
GALERIA DE IMÁGENES



Virgen de Guadalupe, primera copia directa en fotocolor del original. Imagen tomada del libro: Antonio Pompa y Pompa, Álbum del IV centenario Guadalupano, México, Basílica de Guadalupe, 1938, p. 10 bis.
Juan Diego. Imagen tomada del libro:Álbum Conmemorativo del 450 aniversario de las apariciones de Nuestra Señora de Guadalupe, México, Ediciones Buena Nueva, p. 29.


_  _  .  .  .  _  _

No hay comentarios.:

Publicar un comentario